domingo, 31 de agosto de 2014


¡Ja! ¿Ya sabías que me cansaría verdad? Por eso me enviaste una razón un motivo...

Estaría deambulando por las calles con la cabellera sucia del polvo que dejan los días grises, y una bolsa llena de recuerdos que aún el olvido ya olvidó, correría tras las aves, intentaría tan sólo volar junto a ellas, eso ya lo sabías, iría de autobús en autobús con mi muda de ropa perdida en un gris sin ser gris, soñando en el verde de algún árbol que poco a poco deja de ser... 

¡Ay! Si, si que lo sabías, pero aquí estoy aún de pie con las plantas de los pies cansadas, pero impulsadas por una fuerza mayor, aquí estoy todavía pensando en un mañana no por mi, sino por el, parte de mi ser, piel de mi piel... 

Escucho la lluvia caer, y me veo remando en este lago que desemboca en el todo, pues aquí estoy y aquí debo estar; ya el amor se cansó de esperar que perdiera la cordura, ya el amor se cansó de mirarme sentada escribir un futuro con el y sin el, se dio la vuelta, no pudo más, aunque yo digo que sólo fue poco valiente si de verdad quieres algo luchas hasta que no quede un soplo de aliento, hasta que no queda una lágrima más... 

El simplemente no dijo una palabra cabizbajo partió hacia el norte y yo que sigo yendo hacia el sur, y seguiré mi rumbo hasta que mi razón ya no me necesite más! Hasta que sin razón simplemente un día deba echar a un lado los remos y dejar la corriente hacer de las suyas.... 

A.Marte

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