sábado, 6 de septiembre de 2014


Me siento sin rumbo, caminando al vacío en esta pequeña habitación, ¿que ya no me habría preparado para este tipo de ocasión? Siempre pensar que cambiar era sólo tomar la decisión, pero no... No es así.

Se necesita más que ganas esfuerzo y voluntad, se necesita vencer al desprecio y amar la libertad con desapego, pues no sabes que día te toque simplemente tomar asiento en primera fila y ver el film de tu vida...

Es doloroso siempre al otro día lamentarse, así que procura no desviarte del camino, aunque sea vacío y con rumbo perdido, si es lo que escogiste es la mejor decisión, si no es lo que quieres siempre habrá otra opción, pero ¡por favor! Que no quede marcada tu espalda con ramalazos hechos por tu lengua, ¡no! Pues no hay dolor más fuerte que el de lastimarse uno mismo...

Veinte kilos de pasión consumidos por el fuego de la decepción, pero yo sólo te pido, que no se apague tu mirada, que no se quiebre tu almohada con el dolor de tus lágrimas, quiero que cuides tus pensamientos esos si que saben hacer traición y que recuerdes siempre que habrá otro día mejor, quizás mañana, apacienta y duerme tranquila. 

Quizás mañana.... 



A.Marte

No hay comentarios:

Publicar un comentario